Concretamente está compuesto por una combinación de tres vitaminas: B1, B6 y B12 (también llamadas tiamina, pirodoxina y cianocobalamina).
Estas vitaminas son importantes para el metabolismo y la transformación del alimento en energía, la producción de células sanguíneas y el buen funcionamiento del sistema inmune, con lo que su ausencia o déficit de estas vitaminas puede tener repercusiones serias y suele provocar síntomas como fatiga, hormigueos, dolor, anemia, inflamaciones e incluso parálisis y pérdidas de sensibilidad.
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